La primera impresión es decisiva. La página de inicio es, por tanto, la más importante de tu página web. Desde aquí los visitantes pueden acceder a las distintas subpáginas. Por norma general, estos quieren saber con quién están tratando, qué servicios ofreces y cómo pueden ponerse en contacto contigo. Esta información debe mostrarse de un vistazo en la página de inicio. Debe ser clara, comprensible, ordenada y concisa.
Cuando se habla de la información de una página web no solo hay que pensar en el texto. De hecho, en las profesiones más creativas, una imagen puede transmitir más que un mensaje escrito. Los vídeos también son muy útiles.
Muchos de los visitantes que entren en tu página buscan reservar una cita. Por ello, intenta facilitarles al máximo esta tarea e incluye en la página de inicio el número de teléfono de contacto, la dirección y, si es posible, la opción de reservar una cita online. Además, así también contribuirás a una mejor clasificación de tu página web en las búsquedas locales de Google.