En vista de la amplia gama disponible de plataformas como servicio, es difícil dividir los distintos tipos existentes en categorías bien definidas. Esto se debe a que los modelos individuales difieren mucho unos de otros, adaptándose a las diferentes necesidades. No obstante, existen ciertas características que pueden servir como base para identificar diferentes tipos de plataformas como servicio.
Por ejemplo, se hace una distinción entre PaaS de aplicación (aPaaS) y PaaS de integración y gobernanza (iPaaS). El primer modelo describe la provisión de aplicaciones que están equipadas con una interfaz gráfica para su funcionamiento. Por ejemplo, podría ser un programa para uso interno de la empresa al que los empleados puedan acceder a través de la nube.
iPaaS, por otro lado, tiene como objetivo integrar los servicios en la nube, de forma que la plataforma garantiza que no se necesite middleware para suministrar aplicaciones. Un ejemplo de esto es la plataforma Anypoint desarrollada por MuleSoft.
El mero aprovisionamiento de aplicaciones no permite el desarrollo o la prueba de aplicaciones, sino sólo su funcionamiento.
También existen las ofertas abiertas de PaaS. Esto hace referencia a aplicaciones como Google App Engine, que permiten trabajar en un entorno de código abierto y para el que los lenguajes de programación, bases de datos, servidores o sistemas operativos no están predefinidos.
Como ya se ha mencionado, también existen plataformas que se utilizan con fines de comunicación. Este tipo se denomina plataforma de comunicaciones como servicio (cPaaS).