Ahora, cuando escribas una cita en el texto, solo tendrás que añadir la referencia al original. Para ello, abre la pestaña de “Referencias”, donde se encuentra la opción “Insertar cita”. Al hacer clic en ella, Word muestra una lista con todas las fuentes que has guardado. Desplaza el cursor y selecciona la fuente correspondiente. La referencia (en el formato seleccionado) aparecerá directamente en el texto. En algunos casos, las citas no se reproducen entre comillas en el texto, sino que se incluyen en notas al pie. En este caso, primero debes crear la nota al pie y, luego, introducir la referencia a la obra original.
Bajo el botón “Insertar cita” hay otras dos opciones. Por un lado, dispones de la función de “Agregar nueva fuente…”, que permite añadir directamente una nueva fuente a la lista. Por el otro, Word te ofrece la posibilidad de trabajar con marcadores de posición: si escribes una cita en tu trabajo, pero en ese momento no dispones de los datos de la fuente, puedes agregar un marcador de posición y anotar los datos más adelante. Para crear el marcador de posición, solo tienes que introducir un nombre de etiqueta. El registro se guardará con ese nombre y podrás modificarlo después.
Las referencias de las citas no son un simple texto sin formato, sino, más bien, un objeto que puede seleccionarse y personalizarse. Haz clic con el botón derecho del ratón en la referencia para modificarla. Con “Editar esta cita…”, puedes añadir la página de la obra original en la que se encuentra el texto citado. Además, puedes indicar los datos que no deben aparecer en la referencia. La opción “Editar fuente…” enlaza directamente con el registro correspondiente en el administrador de fuentes y permite añadir más información sobre la obra o editar los datos existentes.