La mayoría de empresas basan sus estrategias en el llamado marketing mix en el que se engloban el email marketing, la publicidad en buscadores o SEA, SEO (optimización para motores de búsqueda), los enlaces de afiliados y las redes sociales. El público objetivo determina cómo se establecen las prioridades y se distribuye el correspondiente presupuesto, donde la publicidad SEA, con sus anuncios pagados en los buscadores, tiene el mayor peso. Los profesionales del marketing quieren sacar el máximo partido de cada canal porque, al fin y al cabo, lo que importa es la rentabilidad del capital. Está claro que, como vendedor, quieres sacar el máximo provecho posible de cada canal y los modelos de atribución te ayudan a conseguirlo. Además del customer journey como visión de conjunto, los modelos de atribución también pueden utilizarse para registrar y analizar los distintos puntos de contacto (touchpoints) en los que el cliente entra en contacto con la marca. En el mejor de los casos, esto puede proporcionar información sobre qué puntos de contacto fueron decisivos para la decisión de compra y qué proporción de las ventas fue generada por cada una de las medidas.