Aunque no se trate en sí de una tendencia, pues debe ser de obligado cumplimiento por todas y cada una de las empresas de marketing, encontramos un punto al que hay que prestar especial atención: la protección de datos en relación con la inteligencia artificial. Cierto es que no se trata de un término nuevo, sino más bien de un antiguo conocido, dado que la protección de datos ha sido, es y será un elemento esencial en el marketing. Todos los datos personales facilitan en gran medida el trabajo de los publicistas en Internet, especialmente si se combinan con la inteligencia artificial. No obstante, hay que mantenerse dentro del marco legal, de lo contrario, en el peor de los casos se pierde la confianza de futuros clientes. Con el Reglamento General de Protección de datos (RGDP) las empresas han de cumplir normas estrictas en materia de tratamiento de datos personales.
Principalmente se establece que los clientes deben dar su consentimiento para la recopilación de sus datos, usándose la información solo para el fin que se les ha expuesto. Es decir: los datos proporcionados por un cliente en un proceso de compra no deben usarse para un fin publicitario, pues se carece del consentimiento explícito para ello. Además, hay que asegurarse de que los datos no caigan en manos no autorizadas.
También se exige una gran cantidad de obligaciones de documentación e información: se han de documentar de forma mucho más precisa los datos que se guardan junto a su finalidad, lo que tiene que comunicarse también al usuario y, si así es su deseo, proceder a borrar todos sus datos recopilados. Importante para muchas empresas es también el punto que se esconde bajo “privacy by default” (privacidad por defecto) que establece que los ajustes técnicos para la recopilación de datos personales deben ser tan restrictivos como sea posible y solo tras la aprobación explícita del cliente ser posible compartir sus datos. Para el Email Marketing esto significa que es necesario tratar los datos todavía con más transparencia y tener sobre ellos una responsabilidad mayor.