Para comprender la mecánica de HTTP/3, en primer lugar, es necesario entender cómo funcionan QUIC, UDP y HTTP/2, pues HTTP/3 es básicamente una amalgama de estos componentes. Ya el mismo nombre HTTP-over-QUIC indica que la transferencia de datos no se hace por TCP, sino por UDP.
HTTP/2 utiliza TCP como el protocolo de transferencia más extendido en internet. TCP establece conexiones mediante handshakes de varias fases y transfiere paquetes de datos cronológicamente; además, solo prosigue una transferencia si un paquete ha sido transmitido con éxito. La seguridad de las transferencias se da a través de los llamados acks, es decir, confirmaciones de petición y entrega y números de verificación. Los datos transferidos por TCP contienen un encabezado con parámetros que ayudan a los procesos del emisor a conectarse con los procesos peer del receptor.
En lo que se refiere a la transferencia de datos completa, TCP es muy fiable. Sin embargo, no se puede decir lo mismo en lo referente a la congestión de datosy los tiempos de carga, pues, cuando se pierde un paquete de datos, todas las transferencias se detienen hasta que este llega. Con HTTP/2, la familia de protocolos de internet alcanzaba su límite, porque no era posible acelerar la transferencia de datos sin un protocolo nuevo.
Por lo tanto, Google tomó la iniciativa y desarrolló QUIC, su propio protocolo de transferencia. QUIC evita la congestión de carga por TCP recurriendo a la transferencia por UDP, que se basa en datagramas y no requiere conexión. Al igual que TCP, UDP trabaja en la capa de transporte, pero, por el contrario, renuncia a las confirmaciones de emisor y receptor. Cada transferencia no tiene que esperar a la anterior y los trayectos de ida y vuelta entre cliente y servidor se acortan considerablemente. El IETF reconoció las ventajas de este nuevo protocolo y lo presentó en 2018 como HTTP-over-QUIC, la versión que sustituía a HTTP/2.
Básicamente, el protocolo de transporte HTTP se mantiene igual. Se sigue componiendo de un encabezado (header) y un cuerpo de mensaje (body), y emplea verbos, cookies y caché. La diferencia reside en la forma de transferir los datos y en la disponibilidad del cifrado integrado.