El descrito patrón de lectura en F, uno de los conceptos fundamentales y más conocidos en el marco del estudio de los hábitos de lectura digital, tiene también un papel central en la creación de layouts y, con ello, tanto en el trabajo de los creativos como también en el de los redactores.
Los diseñadores web utilizan el diseño en F para ajustarse a la costumbre del usuario a la hora de leer contenidos digitales, de tal modo que el usuario no perciba el layout como algo ajeno y pueda obtener, de un vistazo y en su forma usual, de izquierda a derecha y de arriba abajo, toda la información relevante.
Lo que suele apreciarse en primer lugar en las páginas web es el branding con el logo y el nombre, que suele localizarse en el encabezado o, por lo menos, en la esquina superior izquierda. A continuación, el lector encuentra la sección con el contenido en sí. Aquí es importante no olvidar que las imágenes son aquel aspecto que más atención atrae, seguidas de cerca por los titulares. El texto, como hemos visto, es el que menos atención obtiene y es leído “por encima” en busca de términos relevantes, pero podemos dirigir la atención del lector destacando palabras en negrita y utilizando títulos secundarios. Hasta aquí la teoría.
El desafío en el trabajo conjunto de diseñadores y redactores consiste en encontrar el equilibrio entre la utilización de estos elementos de anclaje y el cuidado que el contenido se merece. Las imágenes y los titulares son lo primero que llaman la atención, mientras que el texto pierde protagonismo, lo que requiere que las afirmaciones más importantes se sitúen lo más pronto posible en el artículo. Esto, que podría limitar la libertad creativa de los diseñadores, implica más bien la necesidad de recurrir a ideas originales que incluyan recursos tipográficos y elementos innovadores de diseño web. Los diseñadores gráficos han de reflexionar en profundidad sobre los textos, mientras que los redactores, por su parte, tienen que preocuparse de aspectos de diseño.
Es en este trabajo conjunto como surgen nuevos conceptos, como el denominado patrón en Z, resultado de nuevo de la observación empírica de los patrones de lectura en pantalla de los usuarios: en su rápido examen de una página web, el ojo realizaría un recorrido en forma de Z, esto es, comenzaría por la esquina izquierda, seguiría hacia la derecha en dirección a la esquina opuesta para luego bajar en diagonal hacia la izquierda y acabar girando de nuevo hacia la derecha.