Siempre que Excel no sea capaz de ejecutar correctamente un cálculo o una acción, el programa generará un mensaje de error en la celda. Estos mensajes suelen comenzar con una almohadilla (#).
- #N/A: la fórmula no es capaz de encontrar lo que debe buscar.
- #¡VALOR!: un argumento cuenta con el tipo erróneo.
- #¡REF!: la fórmula hace referencia a una celda no válida.
- #¡DIV/0!: se muestra si intentas realizar una división entre un celda que está vacía o que tiene el valor CERO.
- #¡NUM!: la fórmula espera un valor numérico pero se encuentra con otra cosa.
- #¿NOMBRE?: suele emitirse si se ha colado una errata en el nombre de la función.
- #¡NULO!: aparece si se asignan puntos de intersección que no existen.
En la mayoría de los casos, puedes tratar de resolver el problema subyacente. Pero también puede darse el caso de que ya cuentes de antemano con este tipo de errores y no quieras solucionarlos. En este caso, merece la pena hacer uso de la función SI.ERROR de Excel. Esta función te permite, por ejemplo, sustituir la indicación del error por un mensaje propio o un valor.
Esta medida no solo te ayuda a mantener la hoja de cálculo más ordenada, sino que también impide que los demás cálculos se vean afectados. Si en otra fórmula has especificado un rango de celdas en donde aparece un mensaje de error, es posible que esta fórmula genere un nuevo error. Para evitar esta situación, SI.ERROR te permite introducir un valor con el que la fórmula pueda trabajar.