En determinadas circunstancias puede ser necesario dividir a los grupos de influencia importantes en subgrupos para poder determinar los intereses, las necesidades y las posibilidades correspondientes. En el grupo “trabajadores” pueden filtrarse, por ejemplo, los “high potentials”, es decir, los empleados con un valor especial para la empresa. El grupo “Estado y sociedad” se divide generalmente en grupos de interés individuales y en organismos como autoridades, ministerios, asociaciones profesionales, sindicatos, grupos de cabildeo, ONG, prensa y público.
Una vez identificados todos los grupos influyentes relevantes, lo siguiente es analizar hasta qué punto influyen los stakeholders en la empresa o si es esta la que influye en ellos. En el marco del análisis DAFO, el centro de atención se sitúa principalmente en las oportunidades y los riesgos derivados de estas influencias.
Preguntas para evaluar las oportunidades que brindan los stakeholders:
- ¿Qué habilidades, contactos o posibilidades de influencia ofrecen?
- ¿Cómo pueden utilizarse para servir al éxito de la empresa?
Preguntas para evaluar qué riesgos conllevan los grupos de interés:
- ¿Entran en conflicto sus pretensiones con los objetivos de la empresa?
- ¿Qué riesgos implican los conflictos de intereses?
- ¿Cómo pueden minimizarse los riesgos?
Para poder deducir recomendaciones de actuación hay que valorar cuál es el nivel de influencia de cada uno de los stakeholders en la empresa.
A continuación aparece una representación gráfica simplificada de un análisis de las partes interesadas.