La comunicación entre el archivo fuente y de destino tiene lugar, por defecto, a través del protocolo de comunicación TCP (Puerto 873) –con la única condición de que exista un servidor rsync que ya se esté ejecutando. El acceso a un Remote Shell (RSH) sin cifrar o a un Secure Shell (SSH) encriptado también es posible. rsync se ejecuta en Windows, así como en los principales sistemas operativos UNIX, una vez instalado Cygwin (una extensión de Linux). En el mercado existen, además, varios programas de sincronización para Mac OS X, Linux y Windows, basados igualmente en el protocolo rsync. El programa rsnapshot permite realizar copias de seguridad completas o diferenciales. Como rsync, este copia los archivos y crea los llamados enlaces duros (del inglés hard link) de aquellos archivos que no requieran un almacenamiento físico.
El directorio de destino de la copia de seguridad puede estar en el mismo equipo o en un medio de almacenamiento externo. Así, dependiendo de la extensión, se tratará de un disco duro portátil e incluso de otro servidor – por ejemplo, para crear la réplica de un servidor. Ya que el proceso de transmisión se hace de forma comprimida y rápida, rsync resulta especialmente útil para la sincronización de datos en servidores o dispositivos con una conexión de datos deficiente. rsync permite, incluso, la transmisión entre dos equipos en un mismo centro de datos.
A continuación, presentamos los aspectos más relevantes de las copias de seguridad creadas con rsync:
- No se requiere mantenimiento diario
- Red de transferencia de datos comprimidos
- Es posible limitar el ancho de banda durante la creación de la copia de seguridad
- Transferencia segura a través de una conexión SSH
- Permite transmitir grandes cantidades de datos sin problemas
- Carga rápida de las copias de seguridad