En el mundo de la informática, cada vez se oye más el término sandbox, sandboxing o, en español, aislamiento de procesos,pero ¿en qué consiste exactamente esta técnica y cómo se utiliza? Se trata de un entorno de pruebas aislado dentro de un sistema que permite ejecutar ciertas acciones de un programa escudando el hardware para que no pueda ser dañado. En términos generales, por lo tanto, el sandboxing consiste en proteger el sistema operativo frente a código erróneo y malware. En el ámbito del desarrollo de software y la ciberseguridad, el aislamiento de procesos ya se ha convertido en una medida estándar gracias a la cual muchas grandes empresas pueden protegerse frente a daños del sistema y ciberataques.
El sandboxing o aislamiento de procesos no es un concepto nuevo, empezó a usarse cuando se crearon los primeros ordenadores personales. En los años 70, los programadores usaban estas cajas de arenapara poner a prueba los programas y hacer simulaciones. Con ellos querían averiguar si un código concreto podía funcionar en un entorno cerrado. Los primeros mecanismos de seguridad, como Hydra, no solo protegían el costoso hardware, sino que gracias a la técnica del sandboxing permitían identificar qué problemas habrían surgido sin el aislamiento.
Hoy en día existen programas que no solo permiten captar y redireccionar posibles accesos al registro de datos del sistema, sino que, gracias a las máquinas virtuales (VM), se puede simular incluso un ordenador completo.