Una vez analizados los fundamentos y las peculiaridades de este lenguaje de programación libre, surge de forma lógica una pregunta: ¿quién debería hacer el esfuerzo de aprender a escribir con Golang? Como es natural, no es posible dar una respuesta universal, puesto que Go no se ha desarrollado con el fin de sustituir a todos los lenguajes conocidos, sino con el de erigirse como alternativa. Gracias a su eficacia y a su extraordinario rendimiento, aspectos que se reflejan también en las aplicaciones que se programan con él, Go es una interesante opción especialmente en los ámbitos de los negocios y los servidores. Cuanto más código deba escribirse y compilarse, más claras son sus ventajas.
Para los aprendices en programación el proceso de aprendizaje resulta bastante más fácil, sacando provecho de la sencillez de este lenguaje, la cual puede al mismo tiempo ser frustrante para los más experimentados debido a sus similitudes con C o Java. Pero si se superan las molestias ligadas al cambio de uno a otro, también los “viejos” programadores podrían ser capaces de apreciar sus virtudes. Como el mercado de expertos en Go aún no es muy amplio, conocer el lenguaje de Google no deja de representar una gran oportunidad tanto laboral, a la hora de presentarse a un puesto como programador, como privada, de cara a desarrollar una idea propia.