Todos estos puntos fuertes demuestran lo difícil que es para un webmaster prescindir del formato SVG. Los numerosos conflictos con los navegadores, durante años un argumento decisivo en contra de su aplicación, ya forman parte del pasado y hoy parece que el formato gráfico no tiene más que ventajas en cuanto a usabilidad, SEO, accesibilidad web, etc. Sin embargo, como tan a menudo, tampoco es oro todo lo que reluce.
Un inconveniente significativo de las imágenes vectoriales es la reducida variedad de programas disponibles porque, mientras que para elaborar gráficos de píxeles se puede escoger libremente entre una gran cantidad de programas de edición de imagen, para crear, almacenar y convertir archivos SVG se requieren herramientas específicas como Adobe Illustrator o Inkscape. Como consecuencia, trabajar con gráficos SVG puede ser al principio más complejo y requerir algo más de tiempo.
Además de esta, dos son las desventajas de este formato de imagen:
- Elevados requisitos al cliente: si bien HTML5 ha resuelto el problema de las extensiones, también ha desplazado el proceso de renderizado al navegador. De esta forma, la supuestamente ventajosa carga más rápida, resultado de la descongestión del servidor y del liviano peso de los archivos, puede también volverse en contra porque, si el ordenador del usuario no cuenta con la suficiente potencia de cómputo, los gráficos vectoriales más complejos pueden ocasionar fácilmente una entrega diferida de la página. Para anticiparse a este problema se ha de optimizar el código del SVG eliminando elementos superfluos.
- Opciones limitadas de aplicación: debido a la tecnología que lo sustenta, SVG es la medida de todas las cosas cuando se trata de diseñar y escalar elementos sencillos (gráficos, logos, fuentes, etc.). En cambio, aquellas imágenes más elaboradas, que han de poderse cambiar a posteriori, solo se pueden realizar con ayuda de una estructura más compleja con superficies claramente diferenciadas. En el caso de gráficos hiperrealistas, el formato SVG topa pronto con sus limitaciones por su pobreza de detalles (profundidad, sombreado, efectos de luz, etc.).
Si quieres utilizar gráficos vectoriales en tu proyecto, vas a tener que renunciar a imágenes complejas a no ser que quieras dedicar tu tiempo a crearlas desde cero o a copiarlas. Planifica su integración allí donde mejor pueden demostrar sus ventajas técnicas. A la hora de representar imágenes complejas, decántate como hasta ahora por los píxeles.