El buen marketing de guerrilla se nutre de la puesta en escena inusual y de la visualización especial de una idea creativa. El guerrilla marketing se encuentra en aquellas acciones originalmente diseñadas para atraer la vista o en aquellos elementos perturbadores e inesperados en lugares públicos, en diferentes plataformas online o en las redes sociales, incluso allí donde las personas se enfrentan directamente a los contenidos. Se debe sorprender y entretener a los consumidores y a los usuarios de tal forma que tengan que mirar dos veces y que, por consiguiente, se vean motivados a comentarlo y compartirlo con sus círculos sociales.
Esto es visible especialmente en Internet. En las redes sociales, blogs y revistas online se valoran, comparten y discuten acciones publicitarias no tradicionales implementadas en forma de textos, imágenes o vídeos. Como consecuencia, el marketing viral en redes sociales como Facebook, Twitter o Instagram se ha convertido en un elemento fundamental para la aplicación y difusión mundial de la publicidad de guerrilla. Para ello, las acciones publicitarias deben ser de gran interés para que se compartan y propaguen a través de muchos canales digitales y sociales. La ventaja insuperable del marketing viral de guerrilla es que se puede redistribuir por sí mismo por medio de los propios multiplicadores sociales sin ningún tipo de incentivo adicional. De esta forma, los usuarios de Internet se encargan del efecto publicitario.
Este tipo de publicidad boca a boca en Internet se encarga de que los anuncios se queden en la memoria digital colectiva y, teóricamente, generen, incluso años después, millones de fans y de visualizaciones. Esto también tiene implicaciones para las medidas SEO: más tráfico y más alcance de las páginas web corporativas, mayores ventas online y más enlaces entrantes a la empresa, al producto y a la oferta. Como consecuencia, el marketing de guerrilla es un componente multimedia y fundamental del marketing de contenidos.
Algunos de los medios preferidos por el marketing de guerrilla incluyen vídeos de Internet, instalaciones ingeniosas, producciones como flash mobs y publicidad exterior muy llamativa, a menudo con la activa participación de los mismos consumidores. El ingrediente para alcanzar el éxito a largo plazo incluye la presentación divertida, entretenida, polémica, dramática y de carácter único de la información. La divulgación en Internet a través de noticias, redes sociales, blogs y portales de vídeo se encarga de afianzar el carácter inigualable de la experiencia lograda por medio de las medidas de marketing, independientemente de si se llevan a cabo de forma digital o en el espacio físico. Lo más importante es que la publicidad como experiencia sea única, sostenible y fácil de compartir.