La augmented reality (abreviada AR) se conoce en español como realidad aumentada. Esta tecnología incorpora objetos y datos virtuales al mundo real y, de esta forma, lo extiende o aumenta. Los elementos virtuales pueden ser imágenes, textos o animaciones. En cualquier caso, con la realidad aumentada, el entorno real se sigue percibiendo como predominante. La interacción del usuario con los objetos virtuales es desde limitada a nula.
La realidad aumentada es, hasta el momento, la forma más utilizada de realidad extendida. Su éxito se justifica principalmente porque los requisitos técnicos son mínimos. Con un smartphone sencillo, una tableta o un ordenador ya se puede disfrutar de la realidad aumentada, por lo que es fácilmente accesible para los usuarios finales. Además, existen gafas AR especiales que proyectan los objetos virtuales delante de los ojos del portador. En este caso, el mundo exterior sigue siendo visible.
Un ejemplo especialmente conocido y exitoso de realidad aumentada es el juego Pokémon Go, que está disponible como aplicación para iOS y Apple. Figura entre los juegos más conocidos para dispositivos móviles y es, con ganancias superiores a los mil millones de euros, el juego AR de mayor éxito hasta el momento. En Pokémon Go, el dispositivo móvil muestra figuras digitales (Pokémons) en el mundo real y así extiende la realidad. La realidad aumentada también se ha instalado en nuestra vida en las redes sociales: con los filtros, los usuarios complementan, por ejemplo, sus fotos o vídeos con objetos virtuales como sombreros, gafas de sol o incluso maquillaje.